IRENE VAL arquitecta paisajista y artista multidisciplinar
ÁRTICO
Cielo inexpresivo,
convergencia sólida, rígida,
helados paisajes dormidos.
Resplandecen ligeras perlas recién caídas,
ascenderán tapando piedras
como rostros fijos y variables.
Esculturas flotantes
silenciosas, frágiles, inmóviles.
Ninguna dura sombra
sólo refleja, tan blanca.
Si la luz entra
en paisajes dormidos vagamente,
llegan futuras auroras.
MONTAÑA
Vivo como el aire
abierto de montaña.
Deforman, ascienden, bajan luces venososas
en unas zonas alegres y densas,
otras escondidas y vacías como cuevas húmedas,
hasta límpidos huecos o siguen hacia el mar.
Moviéndose blancas rocas, paran o empujan a otras inconstantemente,
montaña viva y firme.
SEQUÍA
Sequía homogénea y vacía
con aire ardiente y espacio desnudo.
Ramas secas se impregnan,
se aíslan
y se rompen,
ampollas y burbujas agujerean,
grietas humedecen.
Creciendo.
Creciendo.
Entre humedales recién mojados
vuelan hojas hacia un cielo despabilado
agresivamente secas y desiertas
vuelven al lugar de sequía homogénea y vacía.